La soledad no deseada es un problema de salud pública que afecta sobre todo a las personas mayores y puede conducir a situaciones de aislamiento y tener consecuencias para la salud.
Es necesario abordar esta realidad para concienciar a la sociedad, prepararse y asumir el proceso de envejecer. Además de adaptar nuestras relaciones familiares y de vecinos, así como los recursos sociales y sanitarios, a este fenómeno social que se agrava año a año.
Tomás nació en Ateca (Zaragoza) hace 83 años, llegó a Zaragoza con 16. Un ictus le obligó a hacer frente a una nueva situación y, desde hace 7 años, junto a sus hijos cuida a su mujer, con alzhéimer. A pesar de todo se ha “sentido muy querido” por el apoyo familiar y por sus amigos. Tener una red social, apoyo familiar y evitar el aislamiento de las personas mayores es fundamental para mejorar su calidad de vida. Lo explica Isabel Antón, de la Asociación de Vecinos Manuel Viola, desde donde ven cómo emergen situaciones de soledad no deseada.
Vive en Pomar de Cinca, en un pequeño pueblo de Huesca. Jesús tiene 92 años, repasa su vida y dice sentirse feliz, “leer es la ilusión más grande que he tenido”. Comparte su vida con sus hijos y sus nietas. No puede dedicarle el tiempo que dedicaba a su huerto, su nieta ha cogido el testigo. El apoyo familiar es una de las cosas más valoradas por los mayores. La soledad afecta negativamente al bienestar psicológico de las personas y es un problema de salud pública, tal y como cuenta Mª Dolores Loncán, enfermera del Centro de Salud Monzón Rural.
14 chicas y chicos del Colegio El Salvador de Zaragoza y del Centro Rural Agrupado de Pomar de Cinca cuentan todo lo que representan sus abuelas y sus abuelos en sus vidas, lo que sienten por ellos… ¿Lo que más les preocupa? Que se sientan solos, que estén tristes y que no sean felices.
"Yo tendría miedo a la soledad si estando en la cama no viera a mis hijos. Si los veo, diré 'Lo has hecho bien"
Tomás, 83 años, Las Delicias
"Debe haber un nuevo aprendizaje, hay que reconocer que el envejecimiento es una parte de la vida"
Isabel Antón, trabajadora social
"La persona que está sola, a veces, no reclama, no pide ayuda y se siente vulnerable y decaída"
Mª Dolores Loncán, enfermera
¿Qué es lo que más preocupa a los nietos y nietas? Que sus abuelos estén solos, que se sientan solos, y que no sean felices...
Los nietos hablan
"Yo no he sentido la soledad" "Siempre he hecho las cosas con ilusión y eso me ha favorecido mucho"
Jesús, 92 años, Pomar de Cinca
No es lo mismo estar solo que sentirse solo
La soledad es una experiencia que surge ante situaciones no elegidas que pueden provocar aislamiento y sentimientos negativos en aquellas personas que la viven.
La pérdida de contacto con nuestros semejantes no solo altera el comportamiento sino que modifica las hormonas del estrés, la función inmune y la función cardiovascular. La soledad puede desencadenar una serie de eventos fisiológicos que aceleran el proceso de envejecimiento y aumentar los riesgos de morir prematuramente.
Planificar de forma sostenible espacio urbano, movilidad y transporte
Incrementar la actividad física en el entorno en el que se vive o trabaja
Reducir la desigualdad en salud por la despoblación y la dispersión.
Mapa de activos y recursos para generar salud y potenciar la autonomía del paciente.
Mejorar la imagen de este colectivo y el proceso de envejecimiento.
Crear una comisión interdepartamental de coordinación de recursos sociales y sanitarios
Eliminación de barreras arquitectónicas, sensoriales y cognitivas.
Estimular la participación de las personas mayores en proyectos intergeneracionales.
Potenciar la atención de proximidad.
Apoyo a los cuidadores directos y evaluación sistemática del riesgo social.
Mejorar los recursos socio-sanitarios para apoyar a las familias.
Impulsar redes de detección y apoyo vecinal para evitar el aislamiento.
Creación de protocolos específicos dirigidos a cambiar estilos de vida, reducir hábitos no saludables.
Reducir de desigualdades en salud según edad, género, clase social, etnia y territorio.
Programas de envejecimiento saludable y autonomía personal.
Establecer redes de apoyo comunitaria para su atención.
Programas de entrenamiento físico en coordinación con los ayuntamientos y prevenir la fragilidad, las caídas y el deterioro cognitivo.
Potenciar el aprendizaje sobre habilidades sociales y cultura emocional.
Intervención en el barrio o zona de salud. Facilitar acceso a servicios sociales y sanitarios.
Incluir hospitales y servicios en la Red Europea de Hospitales Promotores de Salud.
Detección y actuación sobre ancianos vulnerables desde Atención Primaria.
Atención a pacientes crónicos para favorecer la permanencia del paciente en su entorno habitual.
Desarrollar una estrategia autonómica de cuidados paliativos.
Formación continuada sobre el final de la vida.
Continuidad de cuidados en personas que no pueden valerse por sí mismas y que tienen un riesgo social tras el alta hospitalaria
Garantizar un buen morir. Participación del paciente, formación de profesionales sociales y sanitarios
Fomentar la formación en salud mental.
Si lo prefieres puedes escribirnos a: plansaludaragon@aragon.es